Son muchos los países que continúan teniendo el aborto penalizado a lo largo y ancho del planeta, constituyendo según la Organización Mundial de la Salud, un verdadero problema de salud pública para las mujeres. En Europa, Chipre, Irlanda o Polonia penalizan el aborto. Portugal celebró en 2007 un referéndum en el que el Sí a la despenalización del aborto obtuvo una victoria raquítica, cuestionada por el alto porcentaje de abstencionismo. En el caso de España existe una despenalización parcial en tanto que sólo es legal en tres supuestos: la malformación del feto, embarazo provocado por violación y posibles daños físicos o psíquicos para la mujer.Desde la UJCE, reivindicamos la derogación de la ley de supuestos y su sustitución por una ley de plazos. El aborto ha de ser un derecho fundamental que permita a las mujeres decidir libremente sobre sus cuerpos.
Las mujeres hemos de ser libre para decidir y planificar nuestros derechos reproductivos. Aquellos que, como la Iglesia, pretenden controlar la capacidad reproductiva de las mujeres, pretenden controlar su capacidad de decisión, su vida.
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