Los primeros chopos comenzaron ayer a caer. Las obras de construcción de la presa de Soto-Terroba, en el río Leza, se han iniciado con la deforestación de los terrenos donde se ubicará la cerrada.
El embalse, proyectado en los términos de Soto en Cameros y Terroba, afronta sus primeras etapas con el objetivo de garantizar en un futuro cercano el suministro de agua potable en los municipios de la cuenca baja del Leza -Soto, Leza de río Leza, Ribafrecha, Murillo de río Leza y Agoncillo-. Asimismo, el delegado del Gobierno en La Rioja, José Antonio Ulecia, remarcó en el terreno que la obra posibilitará «consolidar los riegos existentes de hasta 1.253 hectáreas aguas abajo de la presa y mantener el caudal ecológico del río, especialmente en verano», cuando el Leza presenta en ocasiones déficit hídrico.
El Ministerio de Medio Ambiente financiará en su totalidad la actuación, cuyo coste asciende a 18.190.134 euros. Los trabajos los ejecutará la UTE compuesta por las empresas Acciona Infraestructuras y Marcor Ebro y cuenta con un plazo de ejecución de 30 meses.
El embalse, localizado entre el punto kilométrico 28,400 de la LR-250 hasta la salida del barranco de Treguajantes, pasado Terroba, acogerá un volumen máximo de 8,14 hectómetros cúbicos de agua, su cota de coronación se situará en los 777 metros y la longitud del mismo superará los 356 metros.
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